La gastroenteritis en una inflamación producida en las paredes del estómago y del intestino:
- La causa más frecuente de esta dolencia es la infección por un virus, aunque también puede producirse por una bacteria o incluso por un parásito.
- Este trastorno provoca pérdida de apetito, diarreas, vómitos, dolor abdominal e incluso fiebre en algunas ocasiones.
- Suele durar menos de 1 semana.
¿Qué debemos tomar si tengo gastroenteritis?
1. Lo importante en esta situación es no deshidratarse (hay que tener un especial cuidado con los niños y los ancianos)
- Los sueros fisiológicos de las farmacias proporcionan una cantidad de electrolitos adecuada frente a las pérdidas que pudiéramos tener.
- Sin embargo las gastroenteritis suelen ser, en la mayoría de los casos, banales (sin complicaciones) y una bebida isotónica comercial sería suficiente para reponer esas pérdidas de electrolitos, aunque no es lo más óptimo, sí es lo más barato, cómo y accesible.
- Si solo se toleran líquidos, no se recomienda beber agua sola, ya que durante los vómitos y las diarreas perdemos muchos minerales, que el agua no puede reponer.
2. Deberíamos seguir una dieta blanda.
La finalidad de la dieta blanda es que tu estómago y tu intestino no trabajen más de la cuenta y así te recuperes antes.
Deberías tomar pequeñas cantidades al principio, para comprobar cómo toleras los distintos alimentos, y después ir poco a poco aumentando las cantidades.
Podemos tomar:
- Agua, caldos hechos con verduras, carnes o pescados e infusiones sin teína.
- Cereales (pan, pasta, arroz y cous cous) no integrales, ya que la fibra empeora la sintomatología.
- Verduras cocinadas, así facilitamos su digestión, cuando se consumen frescas se digieren peor.
- Patatas cocidas.
- Manzanas y peras cocinadas (cuando se asan, cuecen o se cocinan en el microondas su digestibilidad aumenta) y plátanos maduros (los verdes son más indigestos).
- Yogures desnatados blancos, sin azúcar ni edulcorantes ni cereales, ni frutas.
- Claras de huevo cocinadas.
- Pescados blancos.
- Carnes blancas.
Los alimentos se deben tomar a una temperatura adecuada, ni muy fríos ni muy calientes, así mejoraremos su tolerancia y evitaremos el vómito.
Debemos evitar:
– Alimentos grasos y azucarados como:
- Carnes rojas.
- Embutidos.
- Pescados azules.
- Marisco.
- Lácteos enteros (quesos curados, derivados lácteos azucarados, etc.).
- Productos ultraprocesados, encurtidos o alimentos picantes.
- Bollería industrial, cereales de desayuno, chocolate, etc.
– Y técnicas culinarias que aumenten el contenido en grasas y dificulten la digestión como los fritos o rebozados.
Con estas recomendaciones podrás mejorar tu sintomatología y reducir el tiempo que dura esta dolencia.
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