Un consumo diario de estas y otras frutas pueden prevenir el sobrepeso, la obesidad, algunos tipos de cánceres, la diabetes, el estreñimiento y las enfermedades cardiovasculares.
- Cuanto mayor es el consumo de alimentos de origen vegetal, menor es el riesgo de sufrir alguna de las enfermedades relacionadas con el estilo de vida que llevamos.
En el mes de mayo aparecen los albaricoques, nectarinas y melocotones. Veamos que nos aportan estas frutas de temporada.
Albaricoque (mayo – agosto)
El albaricoque es una fruta carnosa de color amarillo-anaranjado que se puede comer tanto fresca como seca.
Es una fuente natural de antioxidantes y nutrientes.
100 gramos de albaricoques (unas 2 piezas) aportan:
- 42 kcal, que no son muchas.
- 2.1 gramos de fibra, que ayudan a mantenernos alejados del estreñimiento y reduce los niveles de colesterol en sangre.
- 0.8 g de proteínas.
- No contienen grasas en su composición.
- Más del 10% de la vitamina C y vitamina A que necesita nuestro organismo. Recuerda que la vitamina C ayuda a reparar huesos, dientes y cartílagos y además forma parte de una proteína que ayuda al tejido cicatricial. Mientras que la vitamina A mejora la visión, protege la piel y mantiene en condiciones óptimas nuestro sistema inmunitario y nuestra mucosidad intestinal.
- Potasio (300 mg), fósforo ( 24 mg), calcio (17 mg), magnesio (12 mg), sodio (1 mg), hierro (0.5 mg), cinc (0.1 mg)
- Es rico es sustancias antiinflamatorias.
- Y contiene oxalato cálcico. Si eres propenso a formar cálculos de oxalato cálcico te aconsejo que reduzcas el consumo de esta fruta o que elijas otra.
¿Tienes problemas de corazón? Los albaricoques te pueden ayudar a regular la frecuencia cardiaca y mejorar los valores de tu presión arterial.
El albaricoque es una fruta climatérica, es decir sigue madurando una vez que es recolectada.
Nectarinas (mayo-septiembre)
Si por algo destacan las nectarinas es por su alto contenido en antioxidantes:
- En función de las necesidades del organismo, los beta-carotenos son transformados en vitamina A para actuar contra los radicales libres.
- La criptoxantina (tiene alto poder antioxidante y es una estupenda fuente de vitamina A), ayuda a neutralizar los efectos dañinos de los radicales libres.
- La vitamina C mejora el sistema inmunitario, disminuyen el tiempo de recuperación de las heridas y aumenta la absorción del hierro, entre otros beneficios.
100 gramos de nectarinas aportan:
- 43 kcal.
- 2.2 gramos de fibra. La fibra ayuda a aumentar el volumen de la dieta, lo que aumenta el grado de saciedad de la persona. Es un gran aliado en la pérdida de peso.
- 1.4 g de proteínas.
- No contienen prácticamente grasas en su composición.
- Vitamina A, vitamina B (B1, B2, B3, B5, B6), vitamina E y vitamina K.
- 170 mg de potasio. El potasio es importante porque ayuda a mantener el pH del organismo, a realizar la síntesis de proteínas e interviene en la metabolización de los hidratos de carbono.
- Minerales como fósforo (22 mg), magnesio (10 mg), calcio (7 mg) y cinc (0.1 mg).
- Ácido clorogénico que ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer como el de colon o el de pulmón.
Además, un consumo regular de nectarina puede ayudar a:
- Prevenir la gastritis.
- Disminuir los niveles de azúcar y de colesterol en sangre.
- Combatir el síndrome metabólico y la presión arterial elevada.
- Mantener una salud cardiovascular óptima.
Las nectarinas es una fruta climatérica, por lo que siguen madurando una vez recolectada.
Melocotón o durazno (mayo – septiembre)
Como sucede con la mayoría de las frutas, el melocotón es una fuente estupenda de sustancias antioxidantes (beta-carotenos que actúan como pro-vitamina A) que ayudan a combatir los radicales libres que hay en nuestro organismo.
100 gramos de melocotón aportan:
- Unas 39 kcal.
- 1.4 gramos de fibra.
- 0.6 gramos de proteínas.
- No contienen grasas en su composición.
- Vitamina A, vitamina B (B1, B2, B3, B6 y B9 o ácido fólico) y vitamina C
- Potasio (260 mg), fósforo (22 mg), magnesio (9 mg), sodio (3 mg), calcio (8 mg), hierro (0.4 mg), zinc (0.06 mg), yodo (2 μg) y selenio (1 μg).
- Xantofilas, que son las responsables del color característico de los melocotones.
Las frutas con hueso como el melocotón, las nectarinas o las ciruelas tienen compuestos bioactivos y fenólicos con propiedades interesantes como que son:
- Antiinflamatorias.
- Antiobesidad (la fibra que contienen estas y otras frutas te ayudan a mantenerte más tiempo saciado. No es que tengan ninguna sustancia que ayude a bajar de peso).
- Previenen la diabetes, el síndrome metabólico y las enfermedades cardiovasculares.
- Reduce el colesterol.
Muchas de las propiedades que tienen los melocotones proceden de la piel, por lo que se aconseja lavarlas bien y comérselas con ella.
Sin embargo en algunas personas, la proteína de esa piel les produce cierta sintomatología (como picor, hinchazón del labio, etc.), en cuyo caso se debería pelar.
Los melocotones es una fruta climatérica, es decir, siguen madurando después de recolectarlas.
Ahora es el momento de consumir albaricoques, nectarinas y melocotones, en unos meses desaparecerán.
Los beneficios de la fruta son numerosísimos, no te los pierdas.
- Tómatela para almorzar, merendar, antes, durante o después de comer o cenar, da igual, el hecho es que tienes que comer una buena cantidad si quieres prevenir un gran número de enfermedades.
- Aquí te dejo algunas formas de tomarla.
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